Medicamentos para las convulsiones

El tratamiento principal para las convulsiones es el uso de medicamentos. Actualmente, hay una amplia variedad de fármacos para tratar las crisis, pero su uso dependerá del tipo de convulsiones, historia clínica del paciente, así como valoración de su médico.

Escrito por el Dr. Ángel Sergio Córdova López (neurólogo). Revisado médicamente por el equipo médico de Aura México – Publicado el 09/02/2023 (Tiempo de lectura aproximado: 29 minutos).

INDICE

1.- Medicamentos para tratar las convulsiones

Recuerda siempre consultar a un médico especialista antes de consumir cualquier medicamento.

Existen diversos tratamientos para las convulsiones, el principal es a través de la toma de medicamentos. El cual debe siempre ser prescito y tener un sumo control por parte de un médico neurólogo especialista en epilepsia El resultado de su toma puede ser que se paren las convulsiones o que disminuya la frecuencia e intensidad de las mismas.

Es importante que como paciente que está siendo tratado con medicamentos antiepilépticos para las convulsiones seas siempre consciente de los posibles efectos secundarios que estos provocan. Así como de cambios en tus estados de ánimo.

El médico neurólogo especialista en Epileptología Clínica encontrará su medicamento y dosis que atienda su afección específica, esto a partir de la frecuencia y tipo de convulsiones, edad y otros factores relevantes. Además, si usted padece de otra afección o consume otra medicina, lo tomará en cuenta para que éstos no interactúen entre sí.

En un principio del tratamiento es muy común que se inicie con un solo medicamento con una dosis baja, la cual paulatinamente aumente tanto en dosis como en número de fármacos hasta que las convulsiones del paciente estén controladas.

La presentación de estos medicamentos suele ser variada, puede ser una solución líquida o jarabe, una tableta de liberación inmediata, tableta de liberación prolongada, tableta soluble o masticables. Y la periodicidad, dosis y tipo de presentación siempre será un tema que verá con su médico tratante quien le explicará las instrucciones y cuidados para su toma.

2.- Lista de medicamentos de Centro Aura

Existen alrededor de 20 tipos de medicamentos para las convulsiones, sin embargo, en Centro Aura hemos realizado estudios estadísticos internos que nos clarificaron que hay 5 medicamentos que actualmente han demostrado un mejor resultado en el 80% de los casos. Estos son el levetiracetam, lamotrigina, valproato, lacosamida y oxcarbazepina. Nota: el restante 20% de los casos requiere de alguno o varios de los demás medicamentos antiepilépticos.

La siguiente tabla muestra la proporción del uso de medicamentos para las convulsiones que se usan en Centro Aura.

*Nota: (estos datos son internos y no deben de ser usados como una referencia o guía de practica clinica)

Es de suma importancia saber que la elección de medicamento tendrá que ir acompañado por un diagnóstico por un especialista y supervisión del mismo. Las convulsiones en ningún caso deben de auto medicarse ni auto diagnosticarse.

Levetiracetam

El levetiracetam es un medicamento para controlar las crisis de inicio parcial con o sin generalización, crisis mioclónicas, crisis mioclónica juvenil, crisis tónico clónicas generalizadas primarias y epilepsia idiopática generalizad. Éste es para uso de adultos, adolescentes y niños de 4 años en adelante.

Este fármaco se puede usar solo, así como en combinación con otros medicamentos. Su acción principal consiste en reducir la excitación anormal del cerebro para así reducir el número de crisis que puede presentar el paciente.

Medicamente su mecanismo de acción es reducir la liberación de calcio interneuronal y se une a la proteína 2A de las vesículas sinápticas, partes de las neuronas del sistema nervioso, involucrada en la exocitosis de neurotransmisores; es decir, para secretar neurotransmisores o mensajeros químicos entre las neuronas y las células de todo el cuerpo.

Lamotrigina

La lamotrigina es un nuevo antiepiléptico nuevo cuya eficacia es muy alta en el control de crisis parciales, tónico clónicas generalizadas, crisis asociadas al síndrome de Lennox-Gastaut, trastorno que ocasiona convulsiones y, con frecuencia, ocasiona retrasos en el desarrollo, y en las crisis de ausencia típica en niños de 2 a 12 años.

Esta medicina pertenece a los fármacos cuya acción es reducir la actividad electica en el cerebro, asimismo, tiene diversas cualidades, entre ellas que tiene un número menor de efectos secundarios, también puede ser un tratamiento coadyuvante y como monoterapia.

Medicamente su mecanismo de acción es bloquear los canales de sodio voltaje dependientes. Bloquea las neuronas hiperexcitadas e inhibe liberación patológica del glutamato.

Valproato

Ácido valproico, valproato de magnesio o valproato de sodio

El valproato también es conocido como ácido valproico, valproato de magnesio o valproato de sodio, la única deferencia que radica entre estos último es su estructura química, la cual una está ligada al ácido y otra al magnesio, por lo cual se pueden ver modificadas la absorción, metabolismo y sitio de acción, sin embargo, en términos farmacológicos no hay diferencia.

Es decir, en pocas palabras, este medicamento se descompone en el estómago siendo al final ácido valproico, principio activo del valproato de magnesio y sodio.

Este fármaco tiene una función antiepiléptica, así como estabilizadora del estado de ánimo. Químicamente no se relaciona con otros tipos de medicamentos anticonvulsivos, ya que éste es de amplio espectro, debido a que actúa en varios canales del sistema nervioso central.

Los distintos tipos de valproato tienen eficacia como tratamiento para las crisis de ausencia, las crisis convulsivas clónica, tónica, mioclónicas, parciales y tónico clónicas.

Medicamente su mecanismo de acción es aumentar los niveles cerebrales de GABA, que es una sustancia química que forma parte del sistema nervioso central y que se genera en el cerebro, disminuye los de aminoácidos excitadores y modifica la conductancia del potasio.

Lacosamida

La lacosamida se utiliza para controlar las convulsiones de inicio parcial, aquellas que involucran solo una parte del cerebro, asimismo como las convulsiones tónico clónicas generalizadas primarias, las cuales involucra a todo el cuerpo. Esta sustancia se puede administrar tanto a adultos, adolescente y niños de 4 años en adelante.

Este fármaco es posible utilizarlo solo o en conjunto con otros medicamentos que controlen la actividad anormal del cerebro.

El mecanismo exacto por el cual la lacosamida ejerce su efecto antiepiléptico en humanos aún no ha sido establecido. Estudios electrofisiológicos in vitro han mostrado que aumenta selectivamente la inactivación lenta de los canales de sodio dependientes de voltaje, produciendo estabilización de las membranas neuronales.

Oxcarbazepina

El oxcarbazepin se puede emplear sola o en combinación con otros medicamentos anticonvulsivos. Estos comprimidos suelen controlar las crisis parciales con o sin generalización secundaria, así como las crisis tónico clónicas.

Esta medicina solo está indicada para personas adultas y niños mayores de 6 años que sufren de convulsiones.

Medicamente su mecanismo de acción es estabilizar las membranas neuronales hiperexcitadas bloqueando canales de sodio voltaje dependientes.

Brivaracetam

El brivaracetam se usa solo y en combinación con otros medicamentos para controlar las crisis convulsivas de inicio parcial con o sin generalización secundaria en adultos, niños y bebés. Este fármaco pertenece a una clase de medicamentos llamados anticonvulsivos, cuya acción consiste en reducir la actividad eléctrica anormal en el cerebro.

Medicamente su mecanismo de acción es modular la secreción de los neurotransmisores.

Carbamazepina

La carbamazepina se usa solo o en combinación con otros medicamentos para controlar ciertos tipos de convulsiones. Este medicamento está indicado como antiepiléptico para los siguientes tipos: epilepsia parcial con sintomatología completa, epilepsia tónico clónica generalizada, patrones de epilepsia mixta, así como convulsiones parciales o generalizadas.

Medicamente su mecanismo de acción es reducir la liberación de glutamato, estabiliza las membranas neuronales y deprime el recambio de dopamina y noradrenalina.

Fenitoina

La fenitoína se usa para controlar cierto tipo de convulsiones y para tratar y prevenir las convulsiones que pueden empezar durante o después de la cirugía de cerebro o del sistema nervioso. Ésta se usa como tratamiento especialmente para el estatus epiléptico de tipo tónico clónico, crisis tónico clónicas generalizadas y crisis parciales simples o complejas.

Medicamente su mecanismo de acción es inhibir la propagación de la actividad convulsivante en la corteza motora cerebral: estabilizar el umbral promoviendo la difusión de sodio desde las neuronas. También es antiarrítmico al estabilizar las células del miocardio.

Clobazam

El clobazam es un medicamento del tipo de los benzodiacepinas, el cual está indicado para adultos, adolescentes y niños que sufren síndrome de Lennox-Gastaut, así como las convulsiones parciales con o sin generalización secundaria que no suelen ser controladas completamente por el tratamiento convencional.

Medicamente su mecanismo de acción es incrementar la actividad del GABA, que es una sustancia química que forma parte del sistema nervioso central y que se genera en el cerebro, al facilitar su unión con el receptor GABAérgico.

Topiramato

El topiramato se usa solo o con otros medicamentos para tratar ciertos tipos de convulsiones incluyendo convulsiones primarias generalizadas tónico-clónicas y convulsiones de inicio parcial, así como tratar a las personas que padecen del síndrome de Lennox-Gastaut.

Este medicamento trata crisis en adultos y niños mayores de 6 años cuando hablamos que solo se administra éste, mientras que cuando se da en politerapia ayuda en las crisis en adultos y niños de 2 o más años.

Medicamente su mecanismo de acción es bloquea los canales de sodio estado-dependientes en las neuronas y potencia la actividad del GABA.

Gabapentina

La gabapentina pertenece a una clase de medicamentos llamados anticonvulsivos. Ésta trata las convulsiones al disminuir la excitación anormal del cerebro.

Este medicamento está indicado como terapia combinada en el tratamiento de crisis parciales con o sin generalización secundaria en adultos y en niños a partir de los 6 años. Mientras que cuando se prescribe como monoterapia en el tratamiento de crisis parciales con o sin generalización secundaria en adultos y en adolescentes a partir de los 12 años.

Medicamente su mecanismo de acción es reducir la liberación de los monoamino neurotransmisores y aumenta el recambio de GABA en varias áreas cerebrales.

3.- ¿Cómo es el tratamiento?

Monoterapia y Politerapia

Para darle tratamiento farmacológico a las convulsiones, es posible hacer uso de un solo medicamento; a esto se le conoce como monoterapia o, bien, hacer una combinación de fármacos cuyo mecanismo de acción es complementario, maximizar su eficacia y minimizar los efectos adversos de estos; a esto se le conoce como politerapia. Cualquiera de las dos opciones sea válida siempre y cuando el paciente se beneficie.

El cuándo saber si es necesario un solo medicamento o una combinación de estos, es una tarea que solamente un especialista médico puede realizar, ya que puede haber una interacción no deseada en el uso y combinación indiscriminado de éstos. Ejemplo de ello es que se presente una pérdida de la eficacia terapéutica, reaparición de las crisis, efectos adversos leves y graves.

Es común que la mayoría de las personas con convulsiones sea tratada con un solo medicamento, es decir; monoterapia, no obstante, esto siempre estará a criterio de su Epileptólogo.

En Centro Aura hemos realizado estudios cuantitativos para medir la cantidad de pacientes con epilepsia que toman 1 medicamento, 2 medicamentos, 3 medicamentos o 4+ medicamentos. Idealmente un paciente bien tratado recibe el menor número de fármacos “posible”. La siguiente tabla muestra la proporción del número de pacientes con epilepsia y el número de medicamentos diferentes que toman cada uno de ellos.

Lo que esta tabla quiere decir es que el 47% de nuestros pacientes toman solo un mediamento. El 31% toman dos medicamentos diferentes. El 16% toman tres medicamentos diferentes. Y el 6% toman 4 o más medicamentos diferentes para controlar sus convulsiones.

Monoterapia en epilepsia

Decir que un paciente con epilepsia está en “monoterapia” significa que solo utiliza un (solo 1) medicamento antiepiléptico.

Las ventajas de la monoterapia es que tiene menos efectos secundarios, mayor adherencia al tratamiento, menor riesgo de interacciones farmacológicas y generalmente un menor gasto económico.

Poli terapia en epilepsia

Existe un alto porcentaje de pacientes epilépticos que no se controlarán después de haber recibido tratamiento en monoterapia con un solo medicamento para las convulsiones. Y entonces necesitan más medicamentos.

La desventaja de la politerapia es que los efectos adversos son acumulativos, mientras más medicamentos para las convulsiones usemos, más efectos adversos podría tener el paciente.

4.- Efectos secundarios

Cuando tomamos cualquier medicación existe la posibilidad de que se presenten efectos no deseados en nuestro organismo. Estos pueden ser moderados o graves, incluso hasta llegar a ser un peligro para la vida del paciente.

La aparición de estos efectos secundarios se debe a diversas causas, mala reacción del cuerpo, interacción entre la enfermedad y la medicación, respuesta negativa entre diversos fármacos, etc.

Y los efectos adversos son muy diversos, pero comúnmente cuando se toman medicamentos anticonvulsivos, es posible que se presenten los siguientes:

• Inestabilidad al caminar.
• Mareos.
• Confusión.
• Irritabilidad.
• Agresión.
• Dolor de cabeza.
• Vómitos y diarrea.
• Somnolencia.
• Dolor de cuerpo.
• Ansiedad.
• Depresión.
• Periodos menstruales dolorosos o ausencia de éstos.
• Dificultad para hablar, pensar o concentrarse.
• Visión doble o borrosa.
• Temblor incontrolable del cuerpo.

Efectos más graves:

• Convulsiones que empeoran.
• Fiebre.
• Sarpullido.
• Ampollas en la piel.
• Urticaria.
• Inflamación de garganta, lengua, labios, ojos y garganta.
• Dificultad para respirar.
• Pérdida de equilibrio.
• Sangrado o aparición de moretones.
• Alteración en el ritmo cardíaco.
• Daño al hígado.
• Debilidad o inflamación de las articulaciones.
• Orina oscura o con sangre.
• Descamación de la piel.
• Alucinaciones y delirios.
• Reacciones alérgicas mortales.

Debido a estas reacciones siempre como pacientes debemos de estar atentos cuando empecemos a tomar un nuevo medicamento, así como asegurarnos que entendemos como tomarlo de manera correcta, así como de indicaciones relevantes, cómo que medicamentos o alimentos se deben evitar para generar reacciones.

Asimismo, es de suma importancia que siempre informe a su médico especialista ante cualquier anormalidad o signo que observe, además de tener un historial clínico con todos sus padecimientos, medicamentos, embarazos, así como cualquier información médica relevante.

Y ante la presencia de cualquier efecto adverso comuníquese con su médico inmediatamente o vaya a su servicio de urgencias médicas.

5.- Conclusiones y recomendaciones del autor

Es importante saber que ningún medicamento para las convulsiones va a curarlo, no obstante, si controlara sus crisis. Es posible que a partir de su tratamiento con un solo medicamento deje de tener convulsiones, sin embargo, esto solo se puede saber a partir del seguimiento y visitas rutinarias con su médico, el cual va evaluar su efectividad.

Su médico podrá aumentar o disminuir la dosis, así como considerar la monoterapia o politerapia, esto dependiendo de cómo vea que le está funcionando la medicación, su tipo de convulsión y si está presentando efectos secundarios, por ello recalcamos que es de suma importancia tener una comunicación sincera y constante con su médico ante cualquier signo anormal que sienta durante su tratamiento.

Si con el tiempo no está presentando síntomas existe una posibilidad de suspender la medicación y mantener una vida sin crisis convulsivas. Su médico especialista le aconsejará el momento adecuado para dejar de tomar sus fármacos, por ningún motivo suspenda su medicación, aumenta o disminuya su dosis o frecuencia sin consultar con el epileptólogo.

En caso que no se vean resultados satisfactorios con ninguna medicación, el médico le recomendará hacer uso de otro tipo de tratamiento como puede ser la cirugía u otro tipo de intervención.

Por último, le recomendamos que mantenga sus fármacos en su envase original, cerrado correctamente, almacenado en un lugar cuya temperatura sea ambiente, lejos de la luz directa, así como exceso de calor y humedad. Asimismo, siempre conserve estos medicamentos alejados de niños y, en caso de que el infante sea quien consuma éstos que siempre sea bajo la supervisión de un adulto.

También recuerde tomarlos tal como lo indica su receta médica, ya que, para llevar un tratamiento exitoso, es importante apegarse a una toma correcta. Y ante cualquier duda y efecto secundario consulte con su médico.

6.- Acerca del Autor

El Dr. Ángel Sergio Córdova López es médico especialista en Neurología y Epileptología por el Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía por la Secretaría de Salud. Es adscrito al servicio de Neurología en el Hospital Español desde 1995, así como en la Clínica Eugenio Sué.