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Crisis convulsiva neonatal

Revisado médicamente por el equipo médico de Centro Aura, México - Actualizado el 23 de febrero 2023. (Tiempo de lectura: 6 minutos).

Una crisis convulsiva neonatal es un episodio en el que un recién nacido tiene convulsiones o movimientos musculares involuntarios. Esta condición puede ser causada por diversas razones, como problemas en el cerebro o el sistema nervioso central, fiebre alta, infecciones o lesiones cerebrales.

Es importante tener en cuenta que las crisis convulsivas neonatales son diferentes de las convulsiones que pueden experimentar los niños mayores y adultos. En los bebés, estas convulsiones pueden ser menos evidentes y pueden manifestarse como movimientos o sacudidas sutiles en los brazos o las piernas.

Las crisis convulsivas neonatales pueden ser aterradoras para los padres, pero es importante recordar que esta afección es tratable y que la mayoría de los bebés se recuperan completamente con el tratamiento adecuado. Si sospechas que tu bebé está experimentando una crisis convulsiva neonatal, es importante buscar atención médica de inmediato.

La crisis convulsiva neonatal es un episodio de movimientos musculares involuntarios que tiene un recién nacido

Causas de la crisis convulsiva neonatal

Las crisis convulsivas neonatales pueden ser causadas por diversas razones, y en algunos casos, puede ser difícil determinar la causa exacta. Algunas de las posibles causas de las crisis convulsivas neonatales incluyen:

  • Problemas en el cerebro o el sistema nervioso central, como lesiones cerebrales o malformaciones congénitas.
  • Fiebre alta o infecciones, como meningitis o encefalitis.
  • Problemas metabólicos, como niveles bajos de azúcar en la sangre (hipoglucemia) o niveles altos de calcio en la sangre (hipercalcemia).
  • Trauma durante el parto o la entrega.
  • Retraso en el desarrollo neurológico.
  • Abuso de drogas o alcohol durante el embarazo.

Es importante tener en cuenta que, en algunos casos, la causa de las crisis convulsivas neonatales puede ser desconocida. Si tu bebé experimenta una crisis convulsiva neonatal, es importante buscar atención médica de inmediato para determinar la causa y recibir el tratamiento adecuado.

Síntomas de la crisis convulsiva neonatal

Los síntomas de las crisis convulsivas neonatales pueden variar dependiendo de la causa de la afección. En algunos casos, puede ser difícil detectarlos, ya que las convulsiones pueden ser sutiles y no siempre son evidentes. Algunos de los síntomas que pueden indicar una crisis convulsiva neonatal incluyen:

  • Movimientos musculares involuntarios, como sacudidas o temblores en los brazos, las piernas o todo el cuerpo.
  • Mirada fija o pérdida de contacto visual con el entorno.
  • Dificultad para respirar o respiración irregular.
  • Cambios en la coloración de la piel, como palidez o enrojecimiento.
  • Regurgitación o vómitos.

Es importante tener en cuenta que algunos bebés pueden no presentar síntomas evidentes durante una crisis convulsiva neonatal, lo que puede dificultar el diagnóstico. Si sospechas que tu bebé está experimentando una crisis convulsiva neonatal, es importante buscar atención médica de inmediato.

Diagnóstico de la crisis convulsiva neonatal

El diagnóstico de una crisis convulsiva neonatal puede requerir una evaluación exhaustiva por parte de un médico. Algunas de las pruebas que se pueden utilizar para diagnosticar una crisis convulsiva neonatal incluyen:

  • Examen físico: El médico puede realizar un examen físico para evaluar la salud general del bebé y buscar signos de convulsiones o problemas neurológicos.
  • Análisis de sangre: Los análisis de sangre pueden ayudar a identificar posibles causas de las crisis convulsivas neonatales, como niveles bajos de azúcar en la sangre o infecciones.
  • Análisis de orina: Los análisis de orina pueden ayudar a detectar posibles infecciones.
  • Electroencefalograma (EEG): Un EEG mide la actividad eléctrica en el cerebro y puede ayudar a identificar patrones anormales.
  • Tomografía computarizada (TC) o resonancia magnética (RM) del cerebro: Estas pruebas de imagen pueden ayudar a identificar lesiones o malformaciones en el cerebro que pueden estar causando las convulsiones.

Tratamiento de la crisis convulsiva neonatal

El tratamiento para una crisis convulsiva neonatal depende de la causa subyacente de la afección. En algunos casos, puede ser necesario hospitalizar al bebé para controlar las convulsiones y administrar tratamiento médico. Algunas de las opciones de tratamiento que pueden ser utilizadas:

  • Medicamentos anticonvulsivos: Los medicamentos anticonvulsivos pueden ayudar a controlarlas y prevenir futuras crisis. El tipo y la dosis de medicamento dependerán de la causa de las convulsiones y la edad del bebé.
  • Antibióticos: Si se identifica una infección como la causa, pueden ser necesarios antibióticos para tratar la infección y prevenir futuras convulsiones.
  • Tratamiento para problemas metabólicos: Si se identifica un problema metabólico, puede ser necesario administrar tratamiento para corregir el desequilibrio.
  • Tratamiento para problemas neurológicos: Si se identifica un problema neurológico, puede ser necesario administrar tratamiento para abordar el problema subyacente.

Es importante seguir las recomendaciones del médico y administrar los tratamientos según las instrucciones para ayudar a controlar las convulsiones y prevenir futuras crisis. Es posible que se requieran controles regulares con un especialista en neurología pediátrica para asegurarse de que el bebé esté recibiendo el tratamiento adecuado y para ajustar el tratamiento si es necesario.

Algunos consejos para manejar las crisis convulsivas neonatales (visitar al pediatra, tener un diario de los episodios

Prevención de las crisis convulsivas en adultos

En algunos casos, las crisis convulsivas neonatales pueden prevenirse con el tratamiento adecuado de las condiciones subyacentes que pueden causarlas. Por ejemplo, prevenir infecciones durante el embarazo y el parto, y tratar inmediatamente cualquier infección que se desarrolle.

Es importante que las mujeres embarazadas reciban atención prenatal regular para asegurarse de que su salud y la de su bebé estén siendo monitoreadas adecuadamente. Además, las mujeres que tienen antecedentes familiares de convulsiones u otros problemas neurológicos pueden beneficiarse de una evaluación especializada para identificar cualquier riesgo.

La identificación temprana y el tratamiento adecuado pueden ayudar a prevenir complicaciones y mejorar el pronóstico del bebé. Es importante buscar atención médica de inmediato si se sospecha que un bebé está experimentando una crisis convulsiva neonatal.

Conclusiones y recomendaciones del autor

La crisis convulsiva neonatal es una condición que puede ser aterradora para los padres primerizos. Sin embargo, con la atención médica adecuada y el tratamiento, la mayoría de los bebés pueden recuperarse completamente de esta afección. Si sospechas que tu bebé está experimentando una crisis convulsiva neonatal, no dudes en buscar atención médica de inmediato. Recuerda que la detección temprana y el tratamiento son clave para garantizar la salud y el bienestar de tu bebé.

Acerca del Autor

Foto de la Dra. Diana Gabriela Guerra García

La Dra. Diana Gabriela Guerra García la caracteriza por sobre todo su amor por los niños, la buena relación que establece con ellos y su interés por ayudarlos. Es egresada de la Facultad de Medicina de la UNAM. Es médica Pediatra con subespecialidad en Neurología Pediátrica formada en el Hospital Infantil de México Federico Gómez. Después de estos estudios decidió expandir sus conocimientos en epilepsia cursando estudios de Epilepsia en la Sociedad Española de Neurología.